Lugar: Murcia
Distancia: 21097m
Hacía ya unos meses que me planteé el reto de la Media
Maratón. No estaba segura, todo hay que decirlo, pero sabía que no podía seguir
estancada en carreras de 10km: tocaba
superarse. Me puse al lío y entre los huecos que me dejaba la Universidad y el apoyo
de un gran grupo de corredoras me puse a entrenar como una loca: madrugones,
falta de sueño y menos fiestas de las que me hubiera gustado,
pero todo merecía la pena con tal de correr la Media Maratón de mi ciudad. Unas
semanas antes de la carrera, algunas chicas y yo nos íbamos a la Mota del Río a
hacer tiradas bastante largas. La primera me costó demonios pero poco a poco
los domingos en el río se hacían preciosos. En una de esas entrené junto a mi
compañera de gritos, música y GoPro: Ainhoa Castillo.
Aquella mañana estaba
realmente cansada, no me veía capaz de hacer los 15 km de aquel día, pero
Ainhoa solo me decía –Belén el día de la Media cuando te quede 1Km, ¿te vas a
retirar? Imaginaos la repercusión que tuvo sus palabras en mi mente.
El tiempo
pasaba más rápido de lo que quería y a una semana antes del gran objetivo tuvo
que pasar: me lesioné. 20 años de mi vida sin hacerme nada y a una semana de la
carrera voy y me lesiono. No me lo podía creer. Realmente pasé una semana muy
mala, no os imagináis hasta qué punto me pude llegar a deprimir. Estaba claro
que ya no iba a poder forzar ni darle mucha caña al tobillo. Todas y cada una
de las Guerreras me animaban; el grupo de whatsapp ardía como nunca, era
increíble. Incluso a chicas que aún ni conozco me mandaban su apoyo. Así que ya
no por mí, sino por ellas y por cada una de las personas que me habían animado
hasta entonces me propuse hacer la carrera lo mejor que pudiera. Con todo,
llegamos al 15 de marzo de 2015: Media Maratón Región de Murcia.
Mis nervios
estaban a flor de piel, apenas sin hablar y más preocupada por mi pie que por
mí misma. Empezó la carrera y llevando apenas 500 metros el tobillo ya se me
resentía. Yo pensaba ‘Belén corre porfavor que puedes, aunque luego vayas coja,
pero acaba los 21 Km porfavor’. Como pude lo hice. En el Km 20 sonaba en mi Mp3
‘Here comes thesun’ de los Beatles.
Esa canción en ese momento fue mi salvación. Lo mejor es que, como no, apareció mi padre: ‘Belén corre guapa que
solo queda uno, ya lo tienes’. No os podéis imaginar lo orgullosa que estoy de
ese hombre. Toda esa mezcla me permitió apretar más y más. De repente vi a la
grandísima Raquel Pérez animándome
también. Eso estaba realmente acabado. Me quité los auriculares y disfruté los
últimos metros. Se acabó. Estaba hecho.
Quizás el tobillo no me dejo
disfrutarla como yo quería, pero ¡qué coño! había hecho mi primera Media
Maratón. Me fui al podólogo a que me
mirara como iba la cosa cuando, de repente, vino Soraya Lumbreras gritando que
me había clasificado en mi categoría. Me cogió del brazo y le faltó subirme
ella al podium en volandas.
Yo estaba en shock: hacía un momento estaba en la
cola del podólogo y ahora en el Podium. ‘Tercera clasificada joven promesa’. Todas
las Guerreras me gritaban y animaban. Fue increíble. Jamás había sentido tanto
aprecio hacia mí. Quiero dar las gracias a todas y cada una de las chicas que
forman el equipo, porque sin vosotras yo hoy no estaría donde estoy, pero sobre
todo quiero darle las gracias a la jefa, a la que hace muuuuucho tiempo, un día
sin dudarlo, me paró en una de mis carreritas por mi calle y me dijo si me
quería unir a un nuevo grupo de
corredoras, aún no estaba formado pero estaban en ello.
Actualmente Guerreras Running está extendido por muchas
zonas de España y los medios de comunicación se hacen eco cada día de nuestros
movimientos.
Ana gracias de corazón por todo lo que haces por este grupo y por
este deporte. Eres muy grande. Gracias a todas por enseñarme que el límite está
donde tú te lo pongas. Gracias por ayudarme a llegar hasta aquí. Por miles de
millones objetivos más a vuestro lado.
A Ana: por hacer que TODO sea posible
A Ainhoa: por sus gritos, sus consejos, su amistad.
A Anita: por estar ahí, por tener siempre una palabra de
apoyo. Por hacerme ver que no estamos solas en esto.
A Bego: o mejor dicho MonstruoBego. Por demostrar que con
poco tiempo se hacen verdaderos milagros. Por ser tan chiquitita pero tan
grande de corazón.
A Sonia: por su bondad, por su humildad, por su superación.
A Soraya: positiva como ella sola. Animadora por excelencia,
sonrisas por bandera y aplausos a todas horas.
A Vicky: la negativa, la que cree que no puede pero luego
demuestra más fuerza que un toro. GRANDE
A Pilar: por cada una de sus subidas a la Fuensanta en plena
recuperación que nos dejan pasmadas. Otra máquina de las que ya no quedan
Al resto, acada una de las que formáis
esto. GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS
Escrito por Belén Moreno. Puedes seguirla en Facebook
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